
El Instituto Tecnológico COSVIC de Costa Rica otorgó a la doctora Xóchithl Guadalupe Rangel Romero, docente e investigadora de la Facultad de Derecho Abogado Ponciano Arriaga Leija de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), la distinción “Líder educativo”. La notificación le fue entregada en mayo por la Junta Suprema de la institución, tras evaluar los expedientes recibidos a través de las redes de investigación.
El COSVIC reconoció a la académica potosina como una representante destacada del liderazgo educativo, sustentado en la innovación y el compromiso social, cualidades que distinguen a las y los profesores de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
En entrevista, la galardonada destacó que el Instituto Tecnológico COSVIC cuenta con más de tres décadas de trayectoria, ofreciendo carreras técnicas y promoviendo que sus herramientas de enseñanza-aprendizaje sean innovadoras y útiles para la juventud.
“La Universidad Autónoma de San Luis Potosí tiene una responsabilidad social que implica, a través de nuestras líneas de investigación, acompañar y analizar los fenómenos complejos que afectan a la comunidad”, señaló.
La doctora Rangel Romero desarrolla investigación educativa en derecho y criminología, Sistema de Justicia Penal para adolescentes, derechos humanos y desaparición forzada de personas. Subrayó que estas líneas de trabajo buscan consolidar un apoyo real frente a los problemas que enfrenta la sociedad.
Explicó que la colaboración en redes de investigación permite conocer cómo se abordan problemáticas similares en otras partes del mundo, lo que enriquece la labor académica y abre espacios para que instituciones extranjeras valoren el trabajo de los investigadores mexicanos. “La responsabilidad social implica que los docentes renovemos nuestras prácticas de enseñanza para ofrecer mejores experiencias de aprendizaje a los estudiantes”, afirmó.
Finalmente, hizo un llamado a visibilizar el trabajo de las universidades públicas, donde el profesorado comparte no solo conocimientos y tecnología, sino también experiencias cotidianas con colegas. “Hoy la criminología necesita humanizarse y dignificarse; por eso, en el aula, los profesores nos estamos reinventando”, concluyó.