noviembre 16, 2024
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•⁠ ⁠El IPICYT se suma a ocho Centros Públicos de Investigación a nivel nacional para la formación de nuevas generaciones que harán investigación en agroecología.

•⁠ ⁠La agroecología busca una alternativa a la producción de alimentos que sea de mucho menos impacto ambiental, social, económico y trata de recuperar el conocimiento local sobre las diferentes formas de producir alimentos

El Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (IPICYT) participa en conjunto con otros ocho Centros Públicos de Investigación (CPI) en el programa de Doctorado Nacional en Agroecología, así se dio a conocer durante la presentación de esta nueva propuesta académica el pasado 23 de enero de 2024 en las instalaciones del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONAHCYT). Al respecto la doctora Elisabeth Huber-Sannwald, investigadora y jefa de la División de Ciencias Ambientales (DCA) del IPICYT, destacó la importancia de este programa tanto por los alcances de la materia de estudio como por el logro en la conjunción de esfuerzos de nueve instituciones académicas.

La Dra. Elisabeth señaló que este programa ha sido una iniciativa del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONAHCYT), quien se acercó al Centro Público El Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR) para que coordinara la propuesta de este doctorado, ya que dicho centro cuenta con una amplia trayectoria en el desarrollo de la agroecología. La agroecología busca una alternativa a la producción de alimentos que sea de mucho menos impacto ambiental, social, y económico y trata de recuperar el conocimiento local sobre las diferentes formas de producir alimentos, manejarlos y recuperar variedades que han sido benéficas en tiempos anteriores, pero que por la optimización de la agricultura y maximización del rendimiento, ya se han perdido.

Entonces – explica la investigadora – realmente la agroecología es una ciencia integral de mucha relevancia desde el punto de vista ambiental, social, económico y actualmente parece ser una prioridad dentro de CONAHCYT promover la formación de nuevas generaciones de recursos humanos en inter- y transdisciplina.

Tras la petición a ECOSUR, relata la Dra. Huber-Sannwald, la coordinadora del Programa del Doctorado Nacional en Agroecología, la Dra. Helda Eleonora de Guadalupe Morales, investigadora titular del mismo centro, se acercó a todos los centros CONAHCYT y finalmente se concretó la participación de nueve de estas instituciones, “durante cerca de 2 años trabajamos en la elaboración de ese programa. El beneficio de un doctorado nacional en agroecología en el que participan este gran número de centros, radica en que los alumnos tengan la posibilidad de conocer instituciones alternas y para conocer diferentes sistemas agroecológicos en contextos distintos tanto geográficos, climáticos, y socio-ambientales”.

Este doctorado – añade la especialista en ciencias ambientales – tiene la posibilidad de que los estudiantes puedan acceder a cursos de las nueve instituciones académicas que forman parte del programa, esto les da la oportunidad de seleccionar cursos optativos conforme a su investigación.

Este programa de doctorado – puntualiza la investigadora – prevé la formación a través de codirecciones, “la y el estudiante se inscribe en su centro de investigación, pero tendrá que buscar un codirector de otro centro”.

En la primera generación, explica la entrevistada, por asuntos administrativos ECOSUR será la única institución que recibirá estudiantes, estos alumnos según su interés de estudio y de los proyectos disponibles, van a buscar a un investigador de alguno de los otros ocho centros que forman parte del programa para codirigir y elaborar el proyecto de investigación.

Para finalizar la Dra. Elisabeth Huber-Sannwald señala que, actualmente en la lista del programa ya se han integrado siete profesores de la División de Ciencias Ambientales y una investigadora de la División de Materiales Avanzados del IPICYT.

A destacar que el programa del doctorado nacional en agroecología se actualizará cada 2 años y se reevaluará cada 5 años.